Las joyas de plata son un clásico que no pasa de moda. Siguen siendo de la preferencia de muchas personas, que optan por estas piezas, incluso ante el oro.
Lo que no muchas personas conocen es que existen diferentes purezas de la plata. La plata es un metal muy blando, y por ello para poder realizar piezas de joyería es necesaria su aleación con otros metales.
La denominada “plata 1000” es la plata 100% pura. Como decíamos anteriormente, al ser la plata un metal blando, es imposible conseguir joyas de plata pura 100%. Se hace preciso alearlas con otros metales; sin embargo existen muchas joyas que se acercan bastante a la plata pura 100%. Debe saberse que cuanto más se acerque la pieza de plata al 1000 más pura es por poseer mayor porcentaje de plata.
Por su parte, la plata 950 tiene un 5% de cobre, mientras que la plata 925 posee un 7,5% de cobre.
Existe plata más baja y puede encontrarse inclusive hasta plata 800. Esta última es plata de muy mala calidad, por la gran cantidad de cobre que posee. Aquellas aleaciones que contienen mucho cobre pueden tornar la pieza en amarilla o roja. Incluso, la plata con mucho cobre puede llegar a manchar la piel de negro o verde. Debe saberse que, sin bien es cierto que la plata 800 o 900 es de mala calidad, es plata después de todo.
Otra inquietud de muchos es conocer la razón por la cual las joyas de plata se oscurecen.
Seguramente, si se guarda alguna pieza de plata en una caja durante algún tiempo, se observará que al querer usarla nuevamente la misma se ha oscurecido y ha perdido su brillo. Lo que debe saberse es que esta reacción del metal es inevitable, y sucede cuando el mismo entra en contacto con determinados agentes, como el ambiente, o el ph de la piel de quien la utiliza.
También debe saberse que ciertos elementos como el perfume, cremas o el ph de algunas personas acelera el proceso de oscurecimiento de la plata, pero en realidad el mismo es inevitable.
La buena noticia para los amantes de la plata es que, si bien se oscurece, su limpieza le devuelve el brillo y belleza original, y dicho proceso de pulido es súper sencillo.
En efecto, para obtener un óptimo resultado en la limpieza de una pieza de plata deberá utilizarse un elemento abrasivo y un detergente.
Como elemento abrasivo, se utilizará bicarbonato de sodio, el cual se colocará en un recipiente con detergente (se puede usar el de cocina). Colocar la pieza de plata en dicho recipiente y frotar con las manos, o con un cepillo de dientes viejo, si se tratare de una joya que posee pliegues o lugares inaccesibles.
Luego, frotar con un trapo seco y pasta de pulir para sacar brillo.
Otra manera de limpiar el óxido en una pieza de plata es utilizando pasta de dientes.