Es importante mencionar que la principal diferencia de las chapas entre el acero laminado en caliente y el laminado en frío es el proceso. “Laminado en caliente” se refiere al proceso realizado con calor. “Laminado en frío” se refiere al proceso realizado a o cerca a temperatura ambiente.
El acero laminado en caliente es el acero que ha sido pasado por rodillos a muy altas temperaturas—más de 1.700˚F, lo que supera la temperatura de recristalización de la mayoría de aceros. Esto hace que al acero sea más fácil darle forma y resulta en productos que son más fáciles de trabajar.
El acero laminado en frío es esencialmente acero laminado en caliente que ha pasado por más procesamiento. Una vez el acero laminado en caliente se ha enfriado, se relamina a temperatura ambiente para alcanzar dimensiones más exactas y mejores cualidades de superficie.